miércoles, 1 de diciembre de 2010

"LAS CASTAÑAS"

Desde que empieza el otoño, estamos acompañados de uno de los productos más característico de esta estación. Las castañas.


En muchos rincones de Córdoba como en otras provincias, se instalan pequeños puestos de castañas asadas.


Al pasar cerca de alguno de ellos a primeras horas de la tarde, cuando los castañer@s comienza a poner en sus hornillos las castañas, el olorcillo característico de este fruto al calor del carbón, deja un rastro que invita a comprar un cucurucho de castañas, que además de proporcionarnos un estupendo tentempié, nos ayuda a calentarnos las heladas manos

Cerca que casa hay uno de estos tenderetes, al que acudo la tarde del domingo, para comprar un puñadito y comerlas con ganas disfrutando de un sabor y textura inconfundible.
Aunque ésta sea la forma más común de consumirlas, no es la única.
La castaña es muy rica en vitaminas y minerales y nada indigesta como se cree.
Sepamos mas cosas sobre las castañas:

Aunque existen indicios de castaños originarios en Europa, relacionados a una especie que no es la que actualmente se cultiva, desde el siglo V se las comenzó a plantar en Grecia y con mayor intensidad a partir del siglo X comenzó su aparición en Roma y posteriormente llega a España y Francia. Las propiedades nutricionales hicieron que sea constituyera en la base alimentaria de los ejércitos de entonces.

Desde tiempos inmemoriales el hombre aprovechó y se alimentó de castañas. El castaño fue denominado “arbuspanis” (árbol del pan) por tribus prerromanas, que las comían asadas, o hacían harina de las castañas secas o "pilongas" (fruta deshidratada al sol), para alimentarse durante todo el año. El legionario romano subsistía de "búllete", que era la harina de castaña seca. En Asia, sobre todo en la región Noreste de China, fue utilizada como dieta más nutritiva que otros cereales y aún hoy es parte central de la dieta de la población.


Fueron la base de la alimentación en Europa. Antes del descubrimiento de America y de la llegada a Europa del maíz y la patata, la castaña, junto al trigo, era la base de la alimentación de la población europea.


Para obtenerse la castaña debe esperarse a que el fruto del castaño madure. Cuando se caen las flores, comienzan a crecer los frutos, su desarrollo dura unos diez meses, hasta que maduran (coincidiendo con la llegada del otoño y las lluvias) y caen al suelo. Es en este momento, cuando se recogen.


Este fruto es un erizo que al momento propicio se endurece y sus púas amenazan con destruir los dedos de cualquiera que quiera tomarlos, pero por dentro son suaves y aterciopelados para dar abrigo y guarecer el fruto que esperamos extraer, las castañas. De acuerdo con la especie, dentro del erizo podremos encontrar
desde 1 a 7 castañas. El tamaño de estas, variara en consecuencia. Cuando el erizo cae, las castañas deben ser extraídas del erizo para que puedan tener una vida útil mas prolongada ya que de no cuidarse tempranamente se pudren muy fácilmente. La perdida de agua hace que pierdan peso y propiedades.


Aunque es en otoño cuando se pueden comprar frescas, el resto del Año se puede adquirir envasadas de diferentes formas, congeladas, al vacío, en almíbar, etc.

Las castañas son muy ricas en hidratos de carbono, contienen menos grasas que los demás frutos secos y están formadas casi por un 50% de agua, estas características hacen que las castañas tengan un contenido calórico (200 calorías por 100 grs.) menor que el de otros frutos secos.
Por su contenido en potasio y carencia de sodio son ideales para los hipertensos.

Las castañas además de tomarse crudas, asadas y en postres, se pueden utilizar para hacer salsas, cremas, guarniciones, etc.


Hay un tipo de castaña llamada castaña de agua china, parecida a la castaña común, pero se trata de un tubérculo de una planta llamada Eleocharis dulcís Trin, originaria de China apreciada por la cocina asiática.


Su composición es muy similar a la de la castaña común, aunque contiene menos hidratos de carbono, proteínas y minerales.
Es rica en vitaminas del grupo B y prácticamente carece de vitamina A y C.
La castaña pilonga es la castaña secada al humo, con lo que pierde parte de su agua quedando solo un 20% de la inicial.

De ella se obtiene la harina de castaña de textura fina y sabor delicado. Se usa como componente de infinidad de platos como la pasta (tallarines de harina de castaña), papillas infantiles, espesante de salsas, panes, etc.

Es muy fácil de digerir por lo que es un excelente complemento de las dietas de personas mayores con problemas de masticación
Se toman en dulce en forma de mermeladas, confites, rellenos de bombones, marrón glasé, en tartas, etc.

Las castañas se pelan más fácilmente si le cortamos la cáscara en toda su circunferencia y luego las metemos tres minutos en agua hirviendo. Hay que pelarlas antes de que se enfríen.


Si añadimos una cucharada sopera de aceite al agua hirviendo, quitaremos la cáscara sin dificultad.


Otro truco consiste en introducir las castañas en el congelador la noche anterior, escaldarlas en agua hirviendo e inmediatamente sumergirlas en un chorro de agua fría y pelarlas a continuación.


Es rica en vitaminas como la B1 (muy valiosa para el sistema nervioso) y la B6 (ayuda a mantener la función normal del cerebro) y, aunque tienen pocas proteínas, son de muy alta calidad.


Suponen una buena fuente de minerales, sobre todo, potasio, magnesio, hierro y fósforo la castaña tiene además una cantidad importante de vitamina C y E, por lo que es rica en antioxidantes.


Hay varias clases de castañas, la marrón, la peregrina, la melespina, la amarilla de Burdeos, la azucarada española, la gruesa roja, la gruesa verde y la común.
A la hora comprarlas tenemos que tener en cuenta que pese, este dura y un color reluciente, esto nos garantiza su calidad.

Para que se conserven en buen estado, ya que es un producto muy perecedero, es mejor tenerlas en lugares fríos y mantenerlas fuera del alcance de cualquier tipo de insectos.

También se utilizan para realizar soufflé, cremas, como guarnición (suelen acompañar al pavo asado, en navidad) y, estofadas con mantequilla, adquieren un sabor buenísimo.

La forma más habitual de comerlas es asada o cocidas. Para asarlas, hay que hacer una raja en la piel para que no estallen. En este caso no hace falta pelarlas, una operación que sí es necesaria si las quieres cocer.


Pese a todo, las castañas tienen la mala fama de ser poco digestivas. Conviene masticarlas despacio y, si se tiene el estómago delicado, es aconsejable cocerlas o asarlas antes que tomarlas crudas


Su harina, que la podemos encontrar en productos como el pan, las galletas o los pasteles, es muy recomendable para los celíacos, ya que no posee gluten.


Este fruto ayuda a aumentar el colesterol bueno y a disminuir el malo, ya que contiene índices aterogénicos muy bajos, lo que significa que no favorece que la grasa se adhiera a las paredes de las arterias.


En resumen las castañas es un fruto muy nutricio con múltiples posibilidades gastronomitas.


Información: Castañas Magla

26 comentarios:

  1. Caray Luisa, querida amiga, que estudio nos has ofrecido de la castaña.
    Desconocía algunas cosas, como sy historia y que hubiera sido base de la alimentación en otros tiempos anteriores a la patata y el maíz.
    Suelo comerlas asadas, pero he de reconocer que para mi, hasta ahora era una gran desconocida.
    La he tomado en marrón glacê, pero me resulta muy empalagosa y además engorda mucho jajajaja.
    Suelo hacer un guisado de ternera (en fiestas) con zumo de naranja, castañas, ciruelas pasas deshuesadas, pistachos, chalotas y cava.
    Lo puedes servir con una guarnición de gajos de manzanas asadas y peladas.

    Es fácil de hacer y puedes tenerlo del dia anterior, con lo que te facilita cualquier dia de fiesta.
    Procuraré buscar recetas en internet y haré algunas cositas para estas fiesta.
    Un besito y gracias, corazón

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  2. Menuda tesis nos has regalado sobre las castañas Luisa, mis felicitaciones.
    Pero yo me quedo con ese aroma inconfundible de nuestro otoño y que espero no desaparezca nunca.

    Un beso Luisa.

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  3. Ay...!!
    Que recuerdos de la infancia, y de las castañas.
    Me quemaban en mis manos, me gustaban calentitas jejejeje
    Un abrazo

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  4. Vaya entrada completa acerca de todo lo que concierne a este delicioso fruto, Me viene a la cabeza las el rico puré de castañas que hacía mi madre con nata, por estas fechas. Igual las hago este año si no me da pereza, gracias a tu idea de hablar de ellas.
    El puré también lo venden como el marrón glasé pero me resultan empalagosos.
    Estupendo post como a los que nos tienes acostumbrados.
    Un beso

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  5. ¡Madre mia! con lo que me gustan las castañas asadas y no tenia ni idea de la cantidad de propiedades que tienen.
    La verdad es que nunca he probado a hacerlas de otra manera que no sean asadas, todo es cuestión de atreverse.

    Buena información amiga, enhorabuena y gracias por acercarnos a conocer mejor este fruto otoñal.

    Un abrazo fuerte que ya va haciendo frio.

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  6. ¡¡Que buenas, las castañas!!

    Me gustan de todas las maneras, Luisa.

    Disfruto cada año, subiendo a la sierra,en noviembre, talega en mano, y pertrechada de unas buenas botas, para coger un buen puñado de castañas. ¿Sabes...? estas están más buenas que las de la tienda, al menos, a mí me lo parece :))

    Me alegro mucho de compartir contigo el mismo barrio de cuna, aunque en la actualidad, sólo paso por allí en ocasiones esporádicas. Tienes mucha suerte de seguir viviendo allí, Luisa. Desde ahora, además de los dulces recuerdos que me acarrea pasear por estas entrañables calles, tambien me acordaré de tí y ¿quien sabe...? Quizá un día nos encontremos.

    Recibe mi abrazo grande, vecina :))

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  7. Buena entrada tocaya sobre las castañas,en casa nos encanta, y asadas ni te cuento,cuando voy por el centro de Sevilla ese olor de los puestos por las calles te invitan a tomarte un cartucho de castaña.
    Un beso guapa.

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  8. Hola Luisa, que buena entrada la de las castañas.
    Recuerdo que mi abuela las cocinaba con arroz. No te cuento como estaba ese arrocito.
    Menos mal que ya hay ambiente para la venta callejera, el año pasado y el anterior teníamos calor y no apetecía nada comprarlas a las castañeras que se suelen poner en las calles de mi barrio.
    Un beso guapa.

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  9. Con esta completa información he quedado muy satisfecho de llegar de nuevo a ti, y sabes....
    ME HAN ENTRADO UNAS GANAS DE COMER CASTAÑAS, que le dire a mi madre que me compre para tostarlas. jajajaja o incluso tomarlas al natural. Besos amiga. cuidate.

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  10. Hola Luisa: Que buena información sobre las castañas.
    ¿Te ha llegado un correo con la invitación a la presentación del libro Poesias desde el alma?
    Será el día 10 a las 20,30 En la sociedad de plateros.
    Me gustaria que asistieras puedes invitar a quien quieras.
    Besos con afecto.

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  11. Aynsss que ricas las castalitas...

    Saludos y un abrazo.

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  12. Y por lo que me toca digo: que las mejores castañas son las gallegas... jajaja
    Ay madre, recuerdo a mi abuela haciendo castañas cocidas que me encantaban y sobre todo las asadas, aún es el día de hoy que cuando huelo a castañas asadas me recuerda a mi abuela (que como buena gallega, cocinaba de morirse..) Hacia unas castañas con chocolate, que no sé como las elaboraba, pero eran deliciosas!
    Con el frío que hace hoy en Málaga y que no para de llover, no me vendría mal un cartucho de castañas. Por cierto Luisa, ¿en Córdoba se llaman cartuchos al triángulo que utilizan las castañeras, hecho de papel de periódico para poner las castañas asadas?

    Muy instructiva tu entrada!!

    Un beso guapa!

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  13. Luna las castañas van muy bien en los asados pero las utilizamos poco.
    En algunas comidas especiales de estos días si se le suele echar, para darle un toque diferente.
    Tienes razón en que el marrón glasé es demasiado empalagoso y además pesado de preparar. Más ligeritas y fáciles si las metemos unos minutos en el microondas jeje.
    Un abrazo y que encuentres una rica receta para navidad.

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  14. Elena yo también, el olor del otoño es especial sobre todo los primeros meses, (en estos días de tanta lluvia ya huele mas a húmedo invierno) y por supuesto va incluido el aroma de los puestos de castañas esparcidos por las calles.
    Un abrazo y ten a mano el paraguas que esto va para rato jeje.

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  15. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  16. Mariola menos mal que las castañas no están pasadas de moda como otras cosas y se siguen comiendo como mejor están asadas al fuego, y por supuesto calentitas, calentitas...
    Un abrazo y gracias por tu comentario.

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  17. .Katy las castañas es el fruto seco del otoño, menos utilizado en la cocina. Estamos más acostumbrados a las nueces, almendras, piñones etc. pero son muy provechosas. Te confieso que yo también me he enterado de algunos beneficios, buscando datos para este post.
    Me alegra que te haya gustado, a ti que eres una experta en informarnos sobre cualquier tema.
    Un abrazo no seas perezosa jeje y métete en la cocina a hacer ese puré de tu madre que debe de estar fabuloso

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  18. Lola me parece a mí que casi todos como mejor conocemos la castaña son asadas, además de estar riquísima y calentar las manos las podemos comprar paseando o hacerlas en el microondas que dicho sea de paso no están mal (aunque no se pueden comparar con las asadas al fuego).
    Te envío un abrazo y gracias por dedicarme unos minutos

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  19. Por supuesto Caracola que como las castañas de nuestra sierra son mejores que las que se compran en las tiendas, además el aliciente de cogerlas del árbol ya las hace de mejor sabor.
    Me alegra que aunque ya no vivas en el barrio, pases por el en ocasiones, como tu dices quizás en algún momento podamos encontrarnos.
    Un cariñoso abrazo.

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  20. Tocaya los puestos de castañas son imprescindibles para el paisaje del otoño. Y el olorcito atrayente para todo el que pasa por su lado.
    Aprovechemos el comerlas antes de que desaparezcan de nuestras calles.
    Un abrazo y gracias por el correo que acabo de recibir tuyo.

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  21. Sonrisa no había escuchado nunca que se guisara el arroz con castañas, que curioso, tiene que estar estupendo. Comidas de antaño que se van perdiendo.
    Aquí también hemos tenido l@s castañer@s muy pronto en las calles.
    Un abrazo y sabes que siempre acojo tus comentarios con cariño.

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  22. Amigo Paco, seguro que tu madre ya te habrá "jartado" de castañas, se que te mima mucho jeje.
    Me alegra verte por aqui.
    Un abrazo guapetón.

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  23. .Josefa si, me ha llegado el correo y tengo intención de ir, espero no me surja ningún imprevisto.
    Supongo que nos podremos conocer y saludar, a ti y a tu hermano.
    Un abrazo y gracias por la invitación

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  24. Hiparión, ricas, ricas, ricas que están las castañas asadas.
    Siempre es grata tu visita. Un abrazo

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  25. Carmen, Galicia tiene la fiesta de la castaña "El magosto" que es famosa y por supuesto unas estupendas castañas (sin desmejorar las de Andalucía jeje).
    Castañas con chocolate uyyyy¡¡¡ que ricas.
    En los puestos de Córdoba te dan las castañas en un cucurucho o cartucho, hecho normalmente de papel basto llamado por aquí de traza e incluso de papel de periódico (esto menos común y menos higiénico).
    Me alegro tu visita Carmen. Te envío un fuerte abrazo y espero estés recuperada del problema con tu tobillo.

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  26. Muy buena entrada Cordobesa. En el pueblo de mi madre, en Galicia, muy cerquita de Portugal, na raia, como le dicen allí, la tierra se valora por los castaños que se tienen. Las Castañas fueron el alimento básico en Galicia, durante mucho tiempo, hasta que vino la patata, como tú muy bien has dicho. Un abrazo

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